La Iglesia Catedral Basílica, es uno de los mayores atractivos de la ciudad. Allí se destaca el púlpito, una de las obras más importantes del barroco colonial en la Argentina. Realizado a mediados del siglo XVII, a partir de los diseños típicos de Cusco, Perú, está tallado en madera de ñandubay y cedro laminado en oro. Se compone de tribuna, respaldo, tornavoz y escalera con baranda, revelando influencia de la escuela potosina.